Aumenta en países de la OCDE el gasto de las familias para universidad
Laura Poy Solano
En los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) se incrementó, entre 2008 y 2013, el gasto que las familias destinaron a la educación universitaria de sus hijos, pues se estima que 30 por ciento de los recursos para este sector provienen de fuentes privadas.
A esto se suma que en ese periodo el gasto privado total para educación aumentó 14 por ciento en promedio para los países integrantes de la organización, lo que incluye a México. Destaca que un porcentaje "relativamente elevado" del gasto para los estudios en nuestro país "proviene de fuentes privadas, en particular de los hogares".
Detalló que de primaria a bachillerato los recursos privados representan 17 por ciento del gasto, lo que ubica a México en el segundo lugar, después de Chile, y muy por encima del promedio de la OCDE, que es de 9 por ciento, mientras en educación superior 32 por ciento proviene de fuentes privadas, que en su totalidad se origina en los hogares, frente a una media de los países miembros de 21 por ciento.
De acuerdo con el Panorama de la Educación 2016 sobre el estado de los sistemas de enseñanza de los 35 países que integran la organización, y en esta ocasión de 11 naciones asociadas –entre ellas Argentina, Brasil, China, Arabia Saudita, Colombia, Costa Rica, India e Indonesia–, advierte que "el gasto por estudiante en términos reales fue 8 por ciento más alto en 2013, en comparación con 2008", pero aclaró que en ese mismo periodo el desembolso de parte de alumnos y familias también aumentó.
Agrega que "si bien algunos países han creado mecanismos de financiamiento que otorgan a más alumnos mejores oportunidades de estudiar, otros aplican tasas impositivas que dejan las oportunidades educativas fuera del alcance de los alumnos, excepto a los más ricos".
Se estima, afirma el reporte, que en todos los países miembros de la OCDE una de cada seis personas de 25 a 34 años no tiene estudios de bachillerato, mientras la tasa de desempleo entre los jóvenes que no cuentan con este nivel educativo alcanza 17.4 por ciento en promedio, en comparación con "6.9 por ciento de quienes, en el mismo grupo de edad, cuentan con estudios universitarios".
Por lo que respecta a las metas educativas de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) 2030, establecidos este año por la Organización de las Naciones Unidas a fin de dar continuidad a los esfuerzos iniciados desde 2000, la OCDE destaca que menos de 50 por ciento de las 35 naciones asociadas han avanzado de forma sostenida en cinco de las 10 metas, que incluyen garantizar formación básica de calidad a todos los niños y adolescentes, así como el acceso equitativo a las oportunidades educativas, incluyendo la formación universitaria para hombres y mujeres.
Alerta que mientras Australia y Canadá son países con alto desempeño para alcanzar los ODM, a los que se suman los Países Bajos y Bélgica, el resto de las naciones aún enfrentan enormes retos, incluido México, en particular en cuanto a las metas de calidad de los resultados de aprendizaje y competencias de los estudiantes y adultos, que "han demostrado ser las más difíciles de cumplir".