domingo, 26 de septiembre de 2010

Óscar Sánchez Daza murió. Esta es una más de las tretas de la historia. Luis Ortega Morales

Pues si, murió Óscar Sánchez Daza.
¿Qué es lo que pretende la vida al quitarnos a aquellos que todavía tienen mucho que aportar a la humanidad? Acaso no quiere que contemos lo que sabemos de sus injusticias y desgracias?
Pero claro, la Historia es lapidaria y nos exige mucho, pero nosotros tenemos que aprender a burlarla y enseñarle que solo nosotros, los humanos, sabemos que hacer sobre nuestro mundo. Nuestro secreto es que transmitimos nuestras experiencias y enseñamos a nuestros jóvenes los secretos de la vida para burlar a la historia que sienpre nos depara desgracias. Nos preparamos para enfrentar la transformación de nuestra sociedad y combatir la historia viviéndola. No todo es capitalismo, injusticia, pobreza y calamidad. La historia nuestra debe ser de felicidad y tenemos que conseguirla a pesar de esa fatalidad histórica que nos mete en un laberinto de problemas irresolubles..
Venceremos a la historia de fatalidades y costruiremos una historia de verdades y felicidades
¿Pero que tiene que platicarnos?, ¿dónde están sus memorias? ¿acaso no tiene nada que decir a las nuevas generaciones?
Óscar fue un activista incansable, dispuesto a combatir al autoritarismo por todos lados. Sufrió golpes, pero supo resistirlos y algunos otros los esquivó con astucia. Participó junto con Joel Arriaga en el Movimiento Democráticio Universitario como lo  hicimos todos los que creíamos en la trasformación socialista de nuestro país, en el estado de Puebla y en la Universidad Autónoma de Puebla. Somos de la generación del '68 y combatimos el autoritarismo. Finalmente, logramos el avance de la democracia con la alternancia y el pluralismo, pero que no fueron suficientes para alcanzar la justicia social.
Fuimos compañeros de lucha, resistimos juntos los embates del garibayismo, el santillanismo y de la Saleroza, financiados por los gobiernos estatales y federales para tratar de acabar con la oposición de izquierda en Puebla, y juntos logramos avanzar. Óscar fue miembro de la Juventud Comunista, reclutado directamente por Joel. Era un activista decidido.
Recuerdo el día 26 de julio de 1968 que salimos del local sindical de don Alfonso Calderón a combatir a los santillanistas, nos dirigimos, con Joel, junto a un centenar de compañeros a la Prepa "Benito Juárez". Ahí tuvimos un enfrentamiento. Despues nos trasladamos al Carolino y en la esquina de la 4 Sur y 5 Oriente tuvimos otro enfrentamiento, pero más violento pues desde la casa de los Santillanas nos dispararon. Cayó un compañero preparatoriano y otro resultó herido. Joel, el Zarco, Jaime Saldaña y otros eran los combatientes.
Resistimos mucho hasta que el "compañerito Castorena" secretario de gobernación del gobierno de Aarón Merino Fernández nos prometió la aprehensión de los satillanas.
Óscar estuvo ahí, como estuvo en 1968 y en otros movimientos. Combatió el golpe de estado contra Samuel Malpica y fue secretario general de la UAP.
Fuimos amigos. Nos identificamos bien. Somos de la misma generación y con muchas esperanzas seguirenos luchando, hasta teminar lo que nos propusimos.
Como todos nuestros compañeros, Joel arriaga, Enrique Cabrera, Luis Rivera Terrazas, Sergio Flores Suárez, Alejandro Mayorga, Joel Guel, los caidos el 1 de Mayo y muchos que  dieron la vida y el pensamiento por la democratización de la UAP.
Si. Luchamos juntos por lograr que la UAP cumpla con su papel formadora de profesionistas críticos y con una visión transformadora de la sociedad de mercado que nos domina.
Ahora nos damos cuenta que no lo hemos logrado, que nuestros anhelos de transformación social han sido cambiados por los de una educación vista como mercancía. La UAP hoy se comporta como una empresa, compitiendo con otras por el mercado de trabajo. Pero, con el cuantioso subsidio del estado, ¿tiene la UAP necesidad de competir con las irrisorias universidades privadas, construidas en coyunturas política e improvisaciones?. Tienen estas capacidad de competir con la largísima tradición y esfuerso de los universitarisos para construir a la Máxima casa de estudios?
Óscar Sánchez Daza se ha ido, como muchos otros. Pero quienes todavía resistimos los embates del capitalismo y la injusticia, continuaremos luchando hasta el final, para lograr los anhelos que nos propusimos cunando iniciamos el combate al capitalismo y que nos dejó como legado Joel, Enrique, Alfonso Calderón, LuisRivera Terrazas y Óscar Sánchez Daza. Salud

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