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sábado, 28 de diciembre de 2013

Derrota de la (s) izquierda (s) en México gar_pro

La gran derrota de la (s) izquierda (s) en México puede resumirse así, en 20 sencillas y prácticas lecciones:

1.- La principal fuerza de la izquierda en México, el PRD, buscó, promovió y quiso ser parte del nuevo régimen político en México; ambiciosos, sus líderes desearon “cogobernar”, pensaron que desde dentro contribuirían a las “grandes transformaciones” que se requieren para estos nuevos tiempos. Por eso, empujaron con fuerza los acuerdos entre las elites partidarias y fueron uno de los principales impulsores del famoso “Pacto por México”, que entró en vigor el 2 de diciembre del 2012.

2.- Pero nunca vieron ni miraron en prospectiva política, tampoco tuvieron la visión política de lo que representaba la restauración del viejo régimen en México, se ilusionaron muy de prisa, colaboraron y terminaron siendo imbuidos por los tentáculos de aquel poder que nunca se fue: el poder –y las mañas- del PRI.

3.- Los tiempos, intereses y ciclos históricos del gobierno de Enrique Peña Nieto nunca fueron -ni estuvieron marcados por- los de la llamada izquierda mexicana.

4.- Maquiavélicamente, el círculo de poder de Peña Nieto tendió puentes y acercó hacia ellos a la parte más proclive a pactar (Nueva izquierda). El presidente necesitaba legitimar su gobierno y requería mostrarse ante la opinión pública como incluyente y tolerante, por lo que forzosamente debía incluir al PRD y a la derecha para empujar sus “grandes reformas” estructurales.

5.- Fragmentado y dividido, el PRD se mantuvo y firmó todos y cada uno de los 90 acuerdos del “Pacto por México”. Contra viento y marea, “Los Chuchos” –jefes de Nueva Izquierda, la corriente dominante en el sol azteca- se sostuvieron en su acuerdo con Los Pinos; esa fue, de hecho, su respuesta para las demás tribus internas, para Marcelo Ebrard y sobre todo para el movimiento y partido de Andrés Manuel López Obrador: Morena, quienes advertían otras rutas de navegación para lograr contrapesos frente al nuevamente ilimitado poder presidencial.

6.- El senador y coordinador de la fracción perredista, el poblano Luis Miguel Barbosa Huerta, entró en fuerte contradicción con Jesús Zambrano, Jesús Ortega y Guadalupe Acosta Naranjo; se opuso a que en el “Pacto por México” se legislara antes que en las cámaras de origen.

7.- El dirigente nacional del PRD, Zambrano, tuvo que sumar e incorporar a las principales corrientes del partido -Izquierda Democrática Nacional (“Los Bejaranos”); Alternativa Democrática Nacional (IDN) y Foro Nuevo Sol (“Los Amalios”)- al consejo técnico y a los acuerdos del famoso “Pacto por México”, porque unos mantenían negociaciones con Miguel Ángel Osorio Chong (Segob), otros lo hacían con Luis Videgaray (SHCP) y unos más con Aurelio Nuño Mayer (jefe de la Oficina de la Presidencia).

8.- Así, obedientes, disciplinados y fieles a sus intereses personales, validaron y aprobaron la reforma educativa, la reforma en telecomunicaciones y sobre todo la reforma hacendaria.

9.- Sacaron de su archivo histórico al ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, para enfrentar la privatización de PEMEX y darle “fuerza moral” a sus protestas e impedir que creciera y les arrebatara banderas López Obrador.

10.- En su Congreso Nacional y bajo un acuerdo cupular de sus corrientes, el PRD acordó seguir en el “Pacto por México” e incluso modificar sus estatutos para beneficiar al caudillo Cárdenas Solórzano, a quien perfilaron como nuevo dirigente nacional.

11.- El ex jefe del Distrito Federal Marcelo Ebrard fue aislado, mientras que el senador perredista Barbosa Huerta –con la salud severamente deteriorada- fue marginado de los acuerdos secretos por la corriente “Nueva izquierda”, su corriente, y se retiró del Congreso Nacional.

12.- Miguel Ángel Mancera, jefe del Distrito Federal, y el gobernador de Morelos, Graco Ramírez, están más cerca de Peña Nieto y sus reformas que del propio PRD.

13.- Cocinaron la reforma política, creyeron que la madre de todas las reformas (la energética) se discutiría hasta el 2014. Y así, cometieron el más grande de sus errores políticos e históricos, pues por omisión les fue impuesta en contubernio con el PAN la joya de la corona: la reforma energética.

14.- De nada sirvió la simulación de unos y otros perredistas tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados.

15.- La movilización “social” del PRD y de Morena fue escasa, poco intensa y demostró la verdadera “fuerza” de una izquierda dividida, enfrentada, deslegitimada y divorciada de la sociedad que dice representar. Fueron totalmente incapaces de convertir su inconformidad en un movimiento social que trascendiera lo político-electoral y Los Pinos la tuvo fácil, tanto que hasta en la casa presidencial se sorprendieron de la rapidez y comodidad con que senadores y diputados aprobaron la reforma energética, con el impulso, claro, de los gobernadores y sus Congresos estatales, que ayudaron a declarar su constitucionalidad en menos de una semana.

16.- El caudillaje y la soberbia del dirigente moral de Morena, López Obrador, quien cayó enfermo, demostró que sin él, las masas sencillamente no se mueven.

17.- Dante Delgado Ranauro, del Partido Ciudadano, desapareció y escondió la cabeza; por su parte, el maestro maoísta Alberto Anaya, líder del PT, anduvo de viaje por el exterior.

18.- En los Congreso locales, y Puebla no fue la excepción, estos partidos (PRD, PT y MC) demostraron una vez más sus miserias políticas. Erick Cotoñeto, diputado y dirigente estatal perredista, puso por delante sus compromisos con el gobernador Rafael Moreno Valle y se olvidó de por lo menos dejar testimonio en la Cámara de la inconformidad de su partido por la reforma energética.

19.- Ni el PRD ni el resto de sus “aliados” pudieron impedir la resurrección del matrimonio entre priístas y panistas, el PRI-AN, que nuevamente demostró que son más las cosas que los igualan que las que los separan; se parecen tanto que ya es difícil diferenciarlos; otra vez, demostraron su gran coincidencia por la acumulación del capital, que a la larga generará una todavía más profunda segmentación de clases sociales en un país de por si marcado por la desigualdad y la injusticia en la repartición de la riqueza.

20.- La izquierda legal no quiere saberlo, no entiende y como es fraticida, acaba de sufrir una de sus más grandes derrotas políticas. La consulta popular o ciudadana que propone contra la reforma energética, será incierta aún para el 2015, y la única alternativa que tendrá la sociedad civil es la movilización social por los cauces pacíficos. Y es que la lección es clara: no cuenten con la izquierda, no sirve para una chingada.

***

Esta columna volverá a publicarse en enero de 2014.

gar_pro@hotmail.com


Si. Pero estás llamando a abandonar el PRD, porque no hay salida. ?o qué propones? Si tu lo escribes entonces se llama a combatir esa política del PRD.
No, empeorarán. Entonces la salida sería construir una alternativa orgánica de izquierda. Morena no lo es. Esta debe ser anticapitalista. Organizadamente los izquierdistas deben tomar medidas.

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